Oraciones de Sanación.
Señor Jesús: CREO que estás Vivo y Resucitado. CREO que estás Realmente presente en el Santísimo Sacramento del Altar, y en cada uno de los que EN TI CREEMOS. Te alabo y te adoro; te doy gracias Señor por venir hasta mí como Pan Vivo bajado del Cielo. Tú eres la plenitud de la vida ¡Tú eres la Resurrección y la Vida!, tu eres Señor la salud de los enfermos, y hoy quiero presentarme a ti Señor, presentarte todas mis enfermedades porque tu eres el mismo ayer, hoy y siempre, y tu mismo me alcanzas aquí Señor hasta donde me encuentro, aquí donde estoy. Tú eres el eterno presente y tú me conoces.
Ahora Señor, te pido que tengas compasión de mi; visítame a través de tu Evangelio, para que todos reconozcan que tu estás Vivo en tu Iglesia hoy, y que se renueve mi fe y mi confianza en ti ¡te lo suplico Jesús hijo de David! ¡Ten compasión de mi!, Jesús hijo de David ¡ten compasión de mi!
Ten compasión de mi Señor, aquí Señor sáname, aquí Señor sáname ¡aquí Señor sáname!
Señor Jesús ¡ten compasión de mis sufrimientos físicos, de mis heridas emocionales, y de cualquier enfermedad de mi alma! Ten compasión de mí Señor, bendíceme y has que vuelva a encontrar la salud. Que mi fe crezca y me abra a las maravillas de tu amor, para que también sea testigo de tu Poder y de tu compasión.
Mira Señor mi enfermedad. Señor, soy tan débil, mira Señor mi dolor, mi sufrimiento; oh Jesús se que tu sufriste aún más, tu conoces el dolor, necesito de tu compasión. Te lo pido Jesús por el Poder de tus Santas llagas, por tu Santa Cruz y por tu Preciosa Sangre ¡Sáname Señor!, sana mi cuerpo, sana mi corazón, sana mi alma, dame vida y vida en abundancia. Te lo pido por intercesión de María Santísima, tu Madre la Virgen de los dolores, la que estaba
presente de pie cerca de la Cruz cuando fuiste Crucificado Señor; la que fue la primera
en contemplar tus Santas llagas, la que nos diste por Madre.
Tú nos has revelado que ya has tomado sobre ti todas nuestras dolencias, y por tus Santas llagas Señor hemos sido curados. Sáname Señor ¡Sáname Jesús!, aquí Señor sáname, ¡aquí Señor sáname de este dolor Señor, libérame, sáname Señor! Por tu Santo Nombre sáname.
Señor Jesús, te presento en fe todas mis enfermedades y te pido que me sanes completamente; te pido por la Gloria del Padre del Cielo, que también sanes a los enfermos de la familia y a mis amigos. Has que crezcan en la fe, en la esperanza, y que reciban la salud para Gloria de tu Nombre, para que tu Reino siga extendiéndose más y más en los corazones a través de los signos y prodigios de tu amor. Todo esto te lo pido Jesús ¡porque tu eres Jesús!, y tu Señor nos prometiste que todo lo que pidiéramos en tu Santo Nombre, tu nos lo concederías.
En tu Nombre Santísimo Jesús te pido que me sanes; tú eres el Buen Pastor y todos somos ovejas de tu rebaño. Estoy tan seguro de tu amor, que aún antes de conocer el resultado de esta Oración, en fe te digo ¡gracias Jesús por lo que tú vas a hacer en mí y en cada uno de los que amo y quiero! Gracias por visitar mi vida, mi corazón, por visitar a los que amo Señor. Gracias por las enfermedades que tu estás sanando ahora; gracias Señor por los que tu estás visitando con tu Misericordia; gracias por escuchar mi Oración, mi clamor; gracias Señor por desvanecer el dolor de mi cuerpo, gracias Señor por sanar esta enfermedad tan insoportable. Gracias por ayudarme Señor, gracias Señor porque mis huesos, mi carne, mis células, mis órganos Señor, todo, tu Señor, lo estás tocando ¡Gracias Jesús por lo que estás haciendo en mi!, bendito sea tu amor; bendito sea tu Sacrificio en la Cruz. Bendito sea por siempre y alabado y glorificado tu paso por la tierra, Hijo de Dios, Jesucristo Redentor, Jesucristo Salvador ¡gracias por acudir a mi!, por venir a mi alma, a mi corazón, por tomarme entre tus brazos, por presentarme ante tu Padre Dios nuestro Omnipotente ¡gracias Señor por este calor, por tu Espíritu Santo de amor!, por tu amor, por tu muerte, por tu Resurrección ¡gracias Jesús, bendito y alabado seas por siempre Señor!, alabado, alabado seas.
AMÉN